La Nebulosa de la Araña Roja. Es una nebulosa planetaria formada alrededor de un sistema estelar binario (en el centro de las patas) donde hay, por lo menos, una estrella enana blanca, una de las más calientes observadas hasta la fecha). De ese centro emanan vientos de 1.000 km/sg que son los responsables de expandir la nebulosa (comparadlos con los 400 km/h de las ráfagas del huracán Patricia del 2015, el más poderoso registrado en la Tierra).
Una nebulosa es una masa de gases, principalmente hidrógeno y helio, además de otros elementos químicos en forma de polvo cósmico. Muchas nebulosas son viveros de estrellas, los lugares donde nacen las estrellas, por condensación y agregación de la materia; otras son los restos de estrellas muertas o que están muriendo cuando las vemos. Éstas se llaman nebulosas planetarias o restos de supernovas, aunque no tienen nada que ver con los planetas.
Unas de las cosas que más excitan nuestra imaginación cuando observamos las nebulosas son sus formas caprichosas. Con las nebulosas hacemos lo mismo que con las nubes, buscamos formas conocidas con las que compararlas. De ahí sus nombres.
Estas dos nebulosas tienen el evocador nombre de "Nebulosas del corazón y del alma". La luz roja del hidrógeno excitado colorea estas masas de gas. Es, sin duda, el color rojo de la sangre. La nebulosa de la derecha parece un corazón gigante. Todo el conjunto se extiende por una distancia enorme, 300 años luz.
Las nebulosas más comunes son "de emisión", como éstas de arriba. Se llaman así porque brillan excitadas por la intensa radiación ultravioleta de las estrellas vecinas. En esta misma imagen se pueden ver esas estrellas azules y muy calientes que se han formado a su alrededor.
Las nebulosas de absorción son oscuras porque no están asociadas a ninguna estrella que las ilumine. Sólo las vemos por contraste contra el cielo estrellado.
La Nebulosa Cabeza de Caballo es, tal vez, la más famosa. Es oscura porque es una nube de polvo opaca que se encuentra delante de una brillante nebulosa roja de emisión.
¿Por qué tienen las nebulosas unas formas tan fascinantes, verdad? Las observamos a través de los telescopios espaciales y nos maravillan sus formas y colores. Por eso a los astrónomos se les ocurren a veces nombres tan evocadores como el de la siguiente imagen: "Los Pilares de la Creación".
Los Pilares de la Creación forman parte de la Nebulosa del Águila. Seguro que sois capaces de ver su pico curvo. En esta imagen los "Pilares" aparecen dentro del cuerpo de la rapaz, pequeñitos, casi como si fueran sus intestinos.
La Nebulosa de la Pata de Gato. ¡El parecido resulta increíble! También llamada "Zarpa de Oso" contiene estrellas muy jóvenes, nacidas en los últimos millones de años, con una masa de diez veces la de nuestro Sol.
Y la Nebulosa Ojo de Gato. Es la imagen del breve y glorioso final de una estrella como nuestro Sol (a nuestra estrella le ocurrirá en unos 5.000 millones de años). El ojo cósmico del centro de la imagen es "pequeño": sólo medio año luz.
Aquí tenéis la Nebulosa del Anillo. A mí me recuerda uno de los géiseres de Yellowstone. Los colores van del más caliente (azul, en el centro) al más frío (rojo). También es el resultado de una estrella similar a nuestro Sol, que se está muriendo.
Esta nebulosa recibe el nombre de "El Casco de Thor", por su forma de gorro y sus apéndices como alas. El casco es una burbuja que se hincha inflada por el viento que sopla desde la estrella central, una estrella gigante y masiva que se cree que se encuentra en la fase de pre-supernova. A mí el casco me recuerda al de Darth Vader.
Y, finalmente, un monstruo. La Nebulosa del Cono. ¡Qué imagen, ¿verdad?! Y sí, lo habéis adivinado, tal y como sucedía en los Pilares de la Creación, en lo alto de este monstruo nacen estrellas: son esos dientes caninos que veis en su boca.
NGC602 es un joven cúmulo estelar de tan sólo 5 millones de años de edad. Está "muy cerca", a unos doscientos mil años luz, en las afueras de la Pequeña Nube de Magallanes, una galaxia satélite de nuestra Vía Láctea.
¿Os imagináis viviendo en un planeta cuyo cielo nocturno fuera éste? A través de la boca de esta cueva cósmica podríamos ver más allá. Esas formas espirales y elípticas son galaxias remotas que giran a millones de años luz de nosotros.
Para terminar, imaginaos que vais navegando por el espacio en el Arca, con los niños puros. A través del ventanal del puente de mando veis, a lo lejos, una pompa de jabón. Es la Nebulosa de la Burbuja. ¡Vamos, acerquémonos! Mirad este vídeo:
https://youtu.be/0821TZvcpcA
¡Y ahora, prosigamos nuestro viaje!
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